Casares, un impresionante a la par que coqueto pueblo malagueño al que muchos reconocen por ser el buque insignia del andalucismo. Entre sus callejones nació y creció el político, escritor e ideólogo Blas Infante en el año 1885.
Si algo caracteriza a este pueblo son sus cuestas y calles estrechísimas, por lo que te recomendamos que si vas a visitarlo utilices calzado cómodo. Especialmente porque el castillo de Casares corona el pueblo sobre una colina y merece mucho la pena vislumbrar las vistas desde allí. Se trata de una fortaleza que los árabes construyeron en el siglo trece como bastión defensivo del reino nazarí.
Apenas a 102,1 kilómetros de Málaga capital, se puede llegar al pueblo en apenas una hora y veinte minutos por la AP-7. Tapear por sus calles y visitar la iglesia de la Encarnación o el templo parroquial de San Sebastián, entre muchos de los planes que puedes hacer allí.